Batalla campal tras detener y robar la carga de un tren

Seis horas de tensión y violencia se vivieron ayer en el barrio Ferrisi, de San Martín, cuando delincuentes de otra barriada comenzaron a arrojar piedras contra las viviendas y a romper las luminarias de la zona, mientras la policía intentaba detenerlos con balas de goma.

Todo comenzó a las 20:30 del sábado, cuando un tren de la ex empresa América Latina Logística fue atacado por vándalos del conflictivo barrio Santa Lucía, quienes atravesaron un durmiente en las vías, lo que ocasionó daños en la formación que tenía como destino final la provincia de Buenos Aires.

Con el tren parado a su disposición, los inadaptados comenzaron a abrir las tolvas de los vagones y empezaron a llevarse la carga, conformada por piedra triturada y otros minerales. Indignado y atemorizado por lo que estaba sucediendo, el maquinista avisó inmediatamente a la policía.

Una hora después, cerca de las 22, el móvil 2687 de la UEP de San Martín, un Toyota Etios (NZJ 562), conducido por el auxiliar Chávez y acompañado por el oficial Giménez se acercaron a la zona para intentar dispersar a los alterados. Pero lejos de lograrlo, fueron atacados a pedradas.

A los pocos minutos llegaron efectivos de la Comisaría 12, Cuerpos Especiales e Infantería de Maipú. Al ver a los uniformados, el grupo de delincuentes se enardeció y con hondas, palos y piedras de grandes dimensiones, comenzó a atacar a los efectivos que respondieron la agresión con balas de goma.

Al mismo tiempo, destruyeron las luminarias y comenzaron a arrojar piedras contra las viviendas, amedrentando a los vecinos con intención de entrarles a robar. De ese modo, lograron adueñarse de algunas cuadras del barrio ante el retroceso de la policía, quien se vio superada por la situación.

"Fue una batalla campal. La policía liberó la zona y quedamos desprotegidos. A un vecino le quisieron entrar a robar y a una vecina (calle Corrientes) le destrozaron la puerta del negocio y le robaron todo lo que tenía en el freezer", explicó un vecino que prefirió el anonimato por temor a represalias.

Las corridas, los gritos y los estallidos de las armas de los policías duraron hasta las 3 de la madrugada, cuando finalmente un grupo de vecinos del barrio Ferrisi y personal policial logró contener la situación. La gresca finalizó con la rotura de un móvil policial, daños en viviendas y sin ningún detenido.

"Muchos arreglos para el centro de San Martín, pero el barrio Ferrisi se ha convertido en tierra de nadie por culpa del barrio que creó el intendente Giménez para los delincuentes de la zona. Es una vergüenza lo que está pasando, estamos inseguros y la policía ni los políticos hacen nada", expresó Jorge.

Ayer, en horas de la mañana, personal de la empresa Belgrano Cargas llegó hasta el límite de los barrios Ferrisi y Santa Lucía, separados por las vías del ferrocarril, para reparar el convoy dañado y trasladar la formación hasta la estación de Palmira.

"Es insoportable vivir de esta manera, ya no podemos salir a la calle. Lo que sucedió anoche ya es demasiado", dijo uno de los vecinos que agregó que, hace unos días, una familia fue asaltada por tres delincuentes armados y encapuchados cuando ingresaba a su casa, ubicada en calle Corrientes.

Los vecinos piden medidas urgentes de parte de la policía y del gobierno municipal. En caso de no obtener respuestas inmediatas, los vecinos analizan la posibilidad de realizar una protesta frente al hospital Perrupato, en el ingreso al barrio Ferrisi.

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